La música de estimulación temprana para bebés es un excelente medio para fomentar el desarrollo integral del niño. La música es una herramienta muy útil en la relación entre los bebés y sus mamás y papás.
No únicamente sirve para tranquilizar al pequeño cuando esté más nervioso o alterado, también se puede usar para estimularle. Gracias a la música, nuestro pequeño podrá experimentar sentimientos y sensaciones agradables, además de pasar un buen rato junto a su papá o mamá.
Beneficios de la música de estimulación temprana para bebés
Durante el embarazo
La música tiene numerosos beneficios para el desarrollo del bebé desde el embarazo. Estimula la frecuencia cardíaca del feto y contribuye a la producción de endorfinas en la madre. Este ambiente musical positivo prepara al bebé para una vida llena de sonidos y ritmos armoniosos.
Después del nacimiento
Una vez que nacen, la música se convierte en una parte esencial para la relajación de los bebés. Se transforma en un lenguaje universal para los recién nacidos, facilitando la conexión emocional con sus padres. Poner música a los pequeños y hacer que la tarareen fomenta y estimula sus ganas de hacerse entender y de expresarse.
Desarrollo del lenguaje
La comprensión de las palabras en los niños se produce gracias a la repetitividad de los sonidos. A través de las vocalizaciones que imitan los sonidos musicales, los bebés expresan el lenguaje de forma intuitiva y espontánea. Esta forma de comunicación facilita el aprendizaje y mejora el vocabulario, haciendo que la música de estimulación temprana sea fundamental en su proceso de crecimiento.
Música clásica para estimular a los bebés
La música de Mozart tiene cierta influencia en el comportamiento de los bebés, fomentando su desarrollo intelectual y creativo. Es lo que se conoce como el ‘efecto Mozart’, es decir, los beneficios que produce, en este caso a los bebés, el escuchar la música de este compositor.
Se han hecho pruebas con la música de otros autores, y no han dado los mismos resultados que las piezas de Mozart, al parecer tienen propiedades distintas y residen en los sonidos de sus melodías. Siendo más puros y precisos. El tono, el ritmo, la métrica y el timbre de la música estimulan el cerebro y activan las neuronas.
Entre las piezas más recomendadas de Mozart están la “Sonata para Dos Pianos en Re Mayor” o los “Conciertos para Violín 3 y 4”. Ambas tienen una frecuencia alta y como consecuencia, consiguen una mayor incidencia a nivel cognitivo. La música de Mozart es un estupendo ejemplo de música de estimulación temprana para bebés.
¿Cómo incorporar la música en sesiones de estimulación temprana?
Incorporar la música de estimulación temprana en la rutina diaria de tu bebé es sencillo y puede hacerse de diversas maneras. Aquí te damos algunas ideas prácticas:
Música durante la alimentación
Pon música suave y relajante mientras alimentas a tu bebé. Esto no solo crea un ambiente tranquilo, sino que también asocia la música con una experiencia positiva.
Cántale canciones de cuna
Las canciones de cuna son una excelente manera de calmar a tu bebé antes de dormir. Escoge melodías suaves y repetitivas para ayudarle a relajarse.
Juega con ritmos y sonidos
Utiliza juguetes musicales y haz que tu bebé interactúe con ellos. Esto estimula su sentido del ritmo y mejora su coordinación.
Tiempo de baño musical
Pon música relajante durante el baño para hacer de esta actividad una experiencia placentera y estimulante.
*Este artículo se publicó originalmente el 24 de febrero de 2017, pero fue actualizado para brindarte mejores consejos.
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